Adriana tiene 30 años. Su ingreso mensual le permitió tramitar y obtener un préstamo hipotecario con el Infonavit. Decidió comprarse su departamento porque, además de tener un ahorro para gastos notariales, tiene una proyección de su vida laboral la cual le favorecía para apartar parte de su ingreso para pagar su hipoteca.
También, había ciertas facilidades que la empresa donde trabaja le otorgaba. Al menos le ayudaron a facilitar los trámites.
Plazos y dinero
Al contratarla el plazo quedó en 30 años. La mensualidad en poco más de 10 mil pesos. Aunque Adriana en un inicio estaba segura que había tomado la mejor opción, de pronto se dio cuenta que una tasa de interés del 12% a lo largo de tres décadas se convertían en una hipoteca muy cara.
Ante ese escenario decidió buscar opciones. Y es que como se dice…ningún contrato está escrito en piedra. O bueno, al menos los hipotecarios. Así, decidió explorar el refinanciamiento hipotecario y analizar las opciones que le ayuden a hacer su dinero más valioso.
Opciones…siempre hay
Pero Adriana, además de buscar otras opciones, decidió hacer un ahorro para “adelantar mensualidades”. Sin embargo, optó por meter ese dinero como pago a capital y refinanciar su hipoteca. Con esto busca dos cosas: tener un crédito más barato y acortar el tiempo.
La hipoteca inicialmente contratada es de un millón 40 mil 156 pesos a 30 años. Pero ahora tiene tres opciones. Y sí, en todas ella estaría abonando esos $150 mil pesos de pago a capital.
HSBC
Este banco le ofrece bajar la tasa de interés hasta 8.30%, con un plazo de 10 años en hipoteca refinanciada. Su mensualidad quedaría en $11,718 pesos. Ligeramente más alta que el plazo inicial, aunque se ahorrará…¡18 años!
Banorte
El llamado Banco Fuerte de México le da otra opción, aunque esta es ligeramente más cara ya que la mensualidad quedaría en $12,270 pesos, ya que el interés sube a 12.270%, aunque el plazo también sería a una década.
Por último, Citibanamex le ofrece un interés de 9.05%, con una mensualidad de $14,114 a diez años.
Entonces…¿conviene cambiarse?
La respuesta es clara y los números no mienten, ya que aunque la mensualidad incremente un poco, el tiempo va disminuir y por tanto la hipoteca será más barata de lo inicialmente proyectado. Además, el componente entre capital e intereses mejora considerablemente.