¿Tienes ADN Emprendedor?

Escuchar las grandes historias de visionarios, emprendedores y hoy grandes empresarios como Elon Musk, Mark Zuckerberg o el mismo Richard Branson, son inspiración pura para quien busca convertirse en emprendedor. Sin embargo, el camino para lograrlo no es fácil y siempre está lleno de obstáculos, aunque también de grandes satisfacciones.  

Pero ser un emprendedor no es una cuestión de moda. Más bien se trata de adquirir ciertos hábitos y conformar nuestro propio ADN Emprendedor. ¿Los ingredientes? Nos dimos a la tarea de recopilar los principales.

1. Resiliencia 

En el camino de todo emprendedor habrá caídas, fracasos o quiebras (emocionales y financieras). Que, mejor dicho, so aprendizajes que nos ayudarán a forjar carácter y adquirir la experiencia necesaria para ser un emprendedor exitoso. Así, la resiliencia es ese valor que te hará levantarte de cada caída y hacer con más fuerza para continuar en tu camino.

2. Determinación

Un emprendedor no tiene, en un inicio, ingresos fijos ni seguros. Podríamos decir que “todo es un riesgo”. Hay algunos que únicamente tienen que invertir tiempo y conocimiento. Pero hay otros que, por la naturaleza de su producto o servicio, sí tienen que hacer un desembolso inicial de dinero. Así que el primer paso será tomar ciertos riesgos y estar consientes que los resultados podrían no ser los mejores. También, tomar en cuenta que si uno recibe un pago quincenal o mensual por el trabajo que realicemos cuando se es emprendedor esto NO está garantizado.

3. Capacidad de reinvención

Como emprendedores necesitamos ser visionarios. Ser capaces de reinventar nuestros productos o servicios constantemente. Esto, con el único fin de mantenernos vigentes en el mercado. Y es que cuando un emprendedor pierde la capacidad de asombro sobre lo que pude vender u ofrece podría ser el punto final de su historia como futuro empresario.

4. Creatividad, ingenio y paciencia

No basta con tener la mejor idea. Tampoco con ser el más visionario. La carrera de todo emprendedor debe tener un ingrediente esencial: paciencia. Sí, una cualidad que es básica para entender que es una carrera de resistencia en la que habrá obstáculos de los cuales aprender.

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